Cuántos lavados son demasiados en lo que respecta al cabello? ¿Puede un lavado excesivo o insuficiente provocar la caída del cabello? ¿Es realmente necesario lavar el cabello rizado a diario?
Sabemos que son preguntas que nos llegan a la menta al hablar sobre el lavado del cabello, aquí te presentamos algunos hechos y recomendaciones sobre la limpieza de tu cabellera.
¿Lavarse el cabello a menudo provoca la caída de cabello?
Si te lavas el cabello con un champú agresivo con demasiada frecuencia, puedes eliminar una cantidad excesiva de aceite (o sebo) del cuero cabelludo. Tu cabello necesita este aceite para mantenerse hidratado; de lo contrario, puede volverse seco, frágil y quebradizo.
Mantén tu cabello sano escogiendo champús más suaves que mantienen el cabello y el cuero cabelludo hidratados, como los champús limpiadores de nuestros Sistema de 3 pasos para debilitamiento de cabello.
Síntomas de lavado excesivo
Si crees que es posible que te estés lavando el cabello con demasiada frecuencia, tu cabello puede darte algunas pistas que indican que necesita un descanso.
- Cuero cabelludo reseco
- Aparición de caspa
- Cabello áspero y crespo
- Picor
Cuando hablamos de cabello sucio, la imagen que nos viene a la cabeza es la de un cabello grasiento. Nuestro cuero cabelludo produce un sebo que hidrata y protege la piel. La producción de sebo depende de diversos factores, como la edad, el sexo, la genética y el entorno.
Los niveles de aceite se incrementan entre la adolescencia y la década de los 20 y los 30 y, posteriormente, se reducen a medida que envejecemos. Por lo tanto, si bien las personas que han alcanzado la madurez pueden pensar que deben continuar lavándose el cabello con la misma frecuencia que antes, en realidad podría resultar perjudicial para su cabello y su cuero cabelludo.
2. Tipo de cabello.
La frecuencia con la que debes lavarte el cabello depende asimismo de su textura. El cabello liso y fino requiere lavados más frecuentes debido a que el aceite puede recubrir los cabellos con más facilidad.
Por el contrario, el cabello rizado, ondulado o más grueso tiende a ser más seco, dado que el sebo no puede recubrir todo el cabello, por lo que no necesita lavarse con tanta frecuencia. Por su parte, el cabello afro es el que debe lavarse con menor frecuencia, idealmente cada 7-10 días, para garantizar que el cabello y el cuero cabelludo estén limpios de acumulaciones al tiempo que se evita eliminar los aceites naturales.
3. Sudor.
Sudar profusamente también puede dar un aspecto sucio y graso al cabello, ya que el sudor puede extender el sebo por los mechones con más facilidad. Por ejemplo, las personas que practiquen ejercicio a menudo se sentirán más inclinadas a lavarse el cabello con más frecuencia.
4. Entorno.
Trabajar en entornos con niveles de contaminación elevados o llevar a cabo tareas de jardinería o limpieza puede hacer que tu pelo necesite un lavado. El polvo, la tierra y el polen pueden quedar atrapados en el cabello, dejándolo apagado, sucio y con un olor desagradable.
5. Uso de productos de fijación.
El uso de productos de fijación, como cremas, geles o lacas, a menudo puede generar acumulación en el cuero cabelludo y dejar el cabello con un aspecto más sucio. Por lo que, si quieres romper el ciclo de lavado excesivo, trata de utilizar productos de estilizado que no saturen el cuero cabelludo, que sean repeinables y que no dejen residuos.
Resulta sencillo caer en un ciclo de lavado excesivo, ya que cuanto más te lavas el cabello, más aumenta la producción de sebo para mantener la piel hidratada, lo que hace que quieras volver a lavarlo.
Para romper el ciclo, tienes que empezar por tomarte un descanso de acuerdo a tu tipo de cabello, entorno, etc. Una de las mejores maneras de resistir la tentación de lavarte el cabello al tiempo que mantienes un aspecto fresco es utilizar un champú en seco.